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Santa
Begoña |
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Su
interior se compone de tres naves con bóvedas
sostenidas por 10 columnas. Tres altares con
imágenes atribuidas a Juan de Mena, capillas y coro.
La Virgen de Begoña es muy venerada en toda Vizcaya,
especialmente por los marinos y las romerías que a
su santuario son muy concurridas. La santa imagen,
cuya historia fue escrita en 1796 por fray Tomás
Granda, está en un retablo de plata, y tiene un
considerable tesoro en ornamentos y alhajas. La
tradición ha ido enriqueciendo la historia con
detalles piadosos. |
Cuenta
la leyenda que la Virgen se apareció en la oquedad
de una encina, en el monte Artagán. Erigieron allí
una minúscula ermita; pero cuando, más tarde,
quisieron buscar un lugar más propicio para la
veneración y la fueron a trasladar de sitio, la
imagen de la Virgen se arraigó al suelo. |
La
costumbre de las gentes de mar al llegar al recodo
de la Ría de Bilbao, que pasa al lado del barrio al
que precisamente lleva el nombre de “La Salve”, era
que al ver las torres de la basílica de Begoña
comenzaran a rezar una "Salve" a la Virgen, en
agradecimiento por haberles protegido en sus viajes
marineros. |
La
Providencia ha querido que, tras de varios traslados
de fecha, el 11 de octubre, festividad de la
Maternidad de la Santísima Virgen, la fiesta
litúrgica de la Patrona de Vizcaya. |
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